viernes, 8 de noviembre de 2013

Filosofia del carpfishing (webcarp)

Como pescadores que somos, tenemos nuestra particular filosofía sobre la pesca, que hemos desarrollado tras muchos años de experiencia y que en la actualidad ha sido influenciada por la cultura deportiva inherente al carpfishing. Tener una ética especial en nuestro comportamiento como pescadores es algo que nos preocupa muchísimo, y que esperamos se extienda entre todos los que practican esta afición en España. Muchos de los puntos que constituyen nuestra particular forma de pensar, no son solo aplicables a la pesca de grandes ciprínidos, sino también a todas las modalidades de pesca. Los principios por los que nos regimos son los siguientes:



PESCA SIN MUERTE

Creemos en la pesca deportiva, pescar por el placer de la lucha con el pez, la confrontación de fuerzas, el desarrollo de la astucia para lograr vencer su desconfianza. Nos embarga un sentimiento de gratitud hacia el pez que hemos capturado, por las emociones que nos ha ofrecido, por la manera en que ha luchado por su vida. Y nosotros no podemos menos que devolvérsela, no podemos tratar mal a quien tanto nos ha dado. Por tanto, devolvemos el pez al agua, para que se recupere y en un futuro próximo, con más peso, vuelva a darnos tantas satisfacciones.

DEVOLVER EL PEZ AL AGUA EN OPTIMAS CONDICIONES

Después de la lucha el pez está exhausto. No podemos abandonarlo a las aguas en estas condiciones, presa fácil de cualquier depredador o susceptible de poder herirse debido a la dificultad de sus movimientos. Por tanto lo mantendremos en el agua con nuestras manos, desplazándolo hacia delante y atrás para que entre agua en sus agallas, ayudándole a respirar. Lo mantendremos recto hasta que se recupere y por si mismo se escape de nuestras manos.

DESENGANCHE POR ROTURA

Si el pez rompe el hilo y arrastra en su huida todo el aparejo, está condenado si el plomo se engancha en cualquier obstáculo. Para evitar esto nuestros montajes estarán pensados para que el hilo se deslice dejando atrás el plomo. Así, el pez podrá moverse con relativa libertad, hasta que se pudra el anzuelo y quede totalmente libre.

UTILIZACIÓN DE ESTERA DE RECEPCIÓN

Tras recoger el pez con la sacadera, no podemos depositarlo en cualquier lugar. Tengamos en cuenta que se trata de peces de gran tamaño y por tanto de gran peso. Dejarlo sobre terrenos duros, o peor, con piedras, puede ocasionar lesiones al pez mientras se resiste cuando intentamos sacarle el anzuelo. Por tanto utilizaremos una estera de recepción de material blando, donde se amortigüen los golpes que el pez pueda dar contra el suelo. Esta estera convendrá que tenga un doble forro, para que podamos cubrir al pez y protegerlo del sol. También tendremos la precaución de mojarla para que el pez no pierda su mucosidad, cosa que pasaría si la tela estuviese seca. Siempre evitaremos colocar al pez sobre su barriga, para no ocasionarle daños internos debido al peso. Disponerlo sobre un costado es la mejor posición tanto para el pez como para nuestro manejo.

SUJETAR CORRECTAMENTE LA CARPA

Para hacer la foto de la carpa deberemos poner una de nuestras manos por debajo a la altura de la cabeza, la otra mano la pondremos por debajo a la altura de la aleta anal. Debido a la mucosidad que segrega la carpa a veces es una tarea difícil, podremos ayudarnos un poco abriendo los dedos y poniéndolos entre las aletas sin torcerlas. Nunca deberemos introducir los dedos entre las agallas o en el hueco del ojo porque esto supondría la muerte del pez.

UTILIZACIÓN DE UNA SACADERA CORRECTA

El uso de una sacadera inadecuada, por el tamaño o por la constitución de la malla, puede dar al traste con nuestra predisposición de no causar daños al pez. Por tanto, utilizaremos un salabre de tamaño grande, adecuado al tamaño de las capturas que queremos realizar, y de una malla específica para carpas. Con ello evitaremos los enganches de las aletas del pez, que pueden romperse y posibles desescamaciones.

CURACIÓN DE HERIDAS (foto Klinik)

Muchas veces nuestra lucha con el pez le ocasiona heridas, que aunque creamos que sean leves, una vez dentro del agua se pueden infectar y pueden ser un riesgo para su vida. Escamas que se sueltan, pérdida de mucosidad, etc. También al sacar el anzuelo podemos ver que no ha quedado un corte limpio, sino una herida de no muy buen aspecto. Debemos hacer lo posible por curar al pez, pues de nada sirve liberarlo si lo hemos dejado en unas condiciones que atentarán contra su vida. Por tanto emplearemos un desinfectante para proteger las zonas afectadas del pez. Podemos recurrir a cualquier medicación de acuariofilia, prepararnos nosotros mismos una disolución de permanganato potásico, que fácilmente encontraremos en farmacias, o mejor recurrir a algún producto específico como el Klinik de KRYSTON.

MANTENER AL PEZ SIEMPRE HUMEDO

Cuando manipulemos la carpa fuera del agua lo haremos lo mas rápido posible. En todo el proceso deberemos cuidar siempre de que la carpa se mantenga húmeda. Previamente habremos mojada la moqueta de desenganche donde la pondremos encima, mientras preparamos todo para realizar la foto taparemos el pez con un saco húmedo para protegerla del sol, mientras tanto no esta de mas el ir tirando agua encima. Haciendo las cosas correctamente evitaremos que la carpa pierda la mucosidad que le cubre y salvaremos sus ojos de las quemaduras que pueden dejarla ciega.

RETIRAR O CORTAR EL ANZUELO

Sacar el anzuelo de la boca del pez, a veces se convierte en una operación casi imposible, con grandes riesgos de dañarle la boca y utilización de un tiempo considerable. En estos casos preferiremos cortar el anzuelo con unas alicates y sacar los dos extremos por separado. El anzuelo podremos reponerlo, la salud del pez no.

NO ALARGAR EXCESIVAMENTE LA LUCHA CON EL PEZ

Intentaremos que la captura no se prolongue demasiado tiempo. Devolveremos el pez al agua en mejor estado físico si la captura se ha realizado en el mínimo tiempo aconsejable. Para ello nuestro material será el adecuado para mantener la lucha con el pez en estas condiciones. Evitaremos hilos muy finos que nos obliguen a alargar la lucha para evitar riesgos de rotura, ni carretes ni cañas que no puedan soportar el empuje de las grandes carpas

CONSERVACIÓN DEL ENTORNO

Si queremos asegurarnos cierto éxito en el carpfishing, tendremos que recurrir a sesiones de varios días, en los que haremos vida al borde del agua. Si no somos cuidadosos, al poco tiempo el lugar estará hecho un basurero. Nuestros desperdicios y nuestros materiales de deshecho, son un peligro para el entorno. Si queremos cuidar la naturaleza, debemos tomar precauciones para asegurar una limpieza absoluta del paraje natural. Nosotros somos los máximos responsables de la conservación de nuestro medio ambiente. Asumamos nuestra responsabilidad y demos ejemplo de nuestro civismo

1 comentario:

  1. Me ha encantado la exposición clara y concisa de nuestra modalidad de pesca, mejor explicado imposible, bien por el autor, ahora queda concienciarnos y aplicarlo, un 10!!! :D

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